Estamos viviendo un momento histórico que quedará en nuestras memorias para siempre y es que han pasado más de 500 días desde que el Covid-19 llegó al mundo para cambiarlo todo. Algo que parecía tan lejano nos alcanzó hasta quedar aislados en nuestras casas.
Y desde nuestras casas continuaba la vida… El confinamiento nos dio la oportunidad de explorar nuevas alternativas para entretenernos, hablar con los nuestros, comprar y hasta trabajar: la sala se convirtió en nuestra nueva oficina, la pijama en el mejor outfit y las llamadas con nuestro equipo de trabajo en algo indispensable. Rápidamente y casi sin darnos cuenta, nos adaptamos a la situación y lo mismo ocurrió en el mundo digital.
En GOD definitivamente representó un gran desafío, pero sin dudas también se abrió la puerta a un mar de oportunidades y sobre todo nuevos retos. ¿Quién mejor que la industria digital para poner el ejemplo en encontrar soluciones alternativas?
“La nueva normalidad”
Atendiendo a todos estos cambios, en GOD pusimos manos a la obra y evolucionamos nuestros proyectos hacia una estrategia más flexible pero con cimientos sólidos.
En otras palabras, trabajamos en crear experiencias relevantes para los consumidores que brinden soluciones reales a sus necesidades. Hicimos de las personas el centro de atención mientras transmitimos los valores de cada marca.
Para nosotros, los datos, la comunicación digital, la creatividad con enfoque en e-commerce conectan directamente con el público es por eso que cada día nos esforzamos por emitir mensajes empáticos con el contexto. Nos apoyamos en la investigación para lograr anticiparnos a nuevos escenarios y tener una reacción oportuna de lo que nos rodea.
Orientamos nuestros esfuerzos en entender a cada cliente en estos tiempos de incertidumbre, abrazando el cambio como nuestra mayor fortaleza y agregando diversos recursos para generar experiencias personalizadas.
Se trata de ser curiosos y comprender que para ser expertos debemos hacerlo a través de ensayo y error.
