Las protestas, manifestaciones y dolorosas respuestas que se han presentado los últimos días por la indignación contra el racismo, desencadenadas después del suceso y muerte lamentable de George Floyd, han influido en la reacción y acciones que algunas marcas y compañías están mostrando como apoyo al movimiento; sin embargo, ¿son significativas estas muestras de solidaridad?
Acciones de apoyo
Marcas de todo el mundo han utilizado, principalmente, las redes sociales para lanzar mensajes de denuncia y declarar su compromiso contra el racismo. Éstas han tratado de alinearse con el movimiento a través de hashtags como #BlackLivesMatter y #JusticeForFloyd.
Ben & Jerry’s recordó en Twitter su apoyo al movimiento Black Lives Matter y lamenta que sus palabras sean “igual de relevantes” después de cuatro años.
Nike’s Dream Crazy presentó un anuncio con el jugador de fútbol americano Colin Kaepernick, acompañado del lema “Por una vez, no lo hagas”, en donde invita a no dejar pasar desapercibido al racismo.
Adidas difundió dicho spot de Nike en su cuenta de Twitter acompañado del texto “Juntos es como avanzamos. Juntos es como hacemos el cambio”.
Reebok publicó en su Instagram: “Sin la comunidad negra, Reebok no existiría. Estados Unidos no existiría”.
Mientras tanto, Netflix ha conseguido más de 1 millón de likes en su publicación que hace referencia al tema: “Guardar silencio es ser cómplice, las vidas negras importan”.
Cabe señalar que algunas marcas han realizado también donaciones monetarias u ofrecido soluciones en iniciativas sociales.
Mark Zuckerberg, creador de Facebook, anunció que donó 10 millones de dólares a grupos que trabajan en justicia racial.
Bliss, la marca de cuidado de la piel sin crueldad, ha realizado una donación de 40 mil dólares al Centro de Investigación y Políticas Antiracistas.
Disney donó 5 millones de dólares para apoyar iniciativas de justicia social, comenzando con una donación de 2 millones al NAACP y otras aportaciones más a United Negro College Fund.
¿Contribuyen a un cambio real?
No es fácil definir o evaluar el “cambio” o influencia real que lograrán las palabras de apoyo publicadas por las marcas. No obstante, sabemos que en algún momento las protestas cesarán y las compañías que han decidido no decir algo al respecto tendrán dificultades para unirse a la conversación más adelante.
Sin embargo, es cierto que las marcas tienen una voz global en distintos niveles de la sociedad; es por ello que el hecho de guardar silencio podría incluso ser erróneo, ya que no se está aprovechando la influencia que tienen.
Asimismo, no es el momento de subirse a una tendencia, sin tener un objetivo social; más bien, es una oportunidad de hacer verdadera reflexión de cómo una marca respalda una causa, o en este caso a la comunidad negra, y qué acciones reales puede realizar para tener un impacto positivo en las calles y dentro de su misma organización, con sus colaboradores, no sólo con el público o clientes.
De esta forma, aplaudimos el papel que han tomado algunas compañías y marcas, ya que contribuyen a la construcción humana del marketing y publicidad; pues están siendo realmente sensibles a los valores del movimiento y a temas de gran impacto social. Además, es destacable que sus actos no sólo se limiten a ser discursivos o con un objetivo de promoción, sino que han demostrado ser profundos y con una apariencia sincera.
